Elegir las cubiertas adecuadas para tu bicicleta es una de las decisiones más importantes que puedes tomar. Son el único punto de contacto con el suelo, y de ellas depende tu agarre, seguridad, confort y rendimiento.
En este artículo te contamos los tipos de cubiertas de ciclismo que existen, sus ventajas e inconvenientes, y cómo elegir la más adecuada según tu modalidad (MTB, carretera o gravel).
Tipos de cubiertas de bicicleta
Antes de elegir una cubierta, es importante entender los diferentes sistemas que existen. Cada uno tiene sus propias ventajas y se adapta mejor a ciertos tipos de ciclistas y terrenos.
Cubiertas con cámara
Son las más comunes y económicas. Funcionan con una cámara de aire interna que se infla para mantener la presión.
Ventajas:
- Fáciles de reparar y reemplazar.
- Ideales para ciclistas principiantes o uso urbano.
- Compatibles con la mayoría de las ruedas.
Inconvenientes:
- Más propensas a pinchazos.
- Menor confort y agarre a baja presión.
Cubiertas tubeless
El sistema tubeless elimina la cámara interna y utiliza un líquido sellante que sella automáticamente los pequeños pinchazos.
Ventajas:
- Mucho menos riesgo de pinchazos.
- Mayor agarre y confort, al poder usar menos presión.
- Menor peso total y mejor rendimiento.
Inconvenientes:
- Requieren más mantenimiento.
- Montaje inicial algo más complejo.
Consejo Klinpig: usa Líquido Tubeless Klinpig y renuévalo cada 3-4 meses. Mantenerlo fresco y en cantidad suficiente garantiza la máxima protección y rendimiento.
Cubiertas tubulares
Las tubulares se pegan directamente a la llanta, sin cámara ni talón. Son las preferidas en competición, especialmente en carretera o ciclocross.
Ventajas:
- Más ligeras y rápidas.
- Excelente comportamiento a altas presiones.
Inconvenientes:
- Difíciles de montar y reparar.
- Precio más elevado.
Son una opción exclusiva para ciclistas experimentados o de competición, que buscan el máximo rendimiento por encima de la practicidad.
Tipos de cubiertas según el terreno
Cada modalidad de ciclismo exige unas cubiertas diferentes. Estas son las más recomendadas según tu estilo y superficie habitual:
Cubiertas MTB (montaña)
Diseñadas para terrenos irregulares, barro, piedras y raíces.
- Taqueado agresivo para máximo agarre.
- Mayor anchura para más estabilidad.
- Normalmente en formato tubeless.
💬 Consejo: combina una cubierta delantera con más agarre y una trasera más rodadora para lograr el equilibrio perfecto entre tracción y velocidad.
Cubiertas de carretera
Cubiertas lisas y finas que priorizan la velocidad y la eficiencia.
- Baja resistencia a la rodadura.
- Se usan con presiones altas.
- Los anchos más comunes hoy son 25–30 mm, ideales para combinar velocidad y confort.
Perfectas para asfalto y ciclistas que buscan rendimiento y ligereza.
Cubiertas de gravel
El punto medio entre MTB y carretera.
- Dibujo mixto: liso en el centro y taqueado en los bordes.
- Ancho intermedio (35–45 mm).
- Buen equilibrio entre agarre y velocidad.
Ideales para rutas mixtas de asfalto, pistas y caminos rurales.
Factores clave para elegir tus cubiertas
A la hora de elegir la cubierta perfecta, ten en cuenta estos factores:
-
Ancho: más ancho = más confort y agarre, pero menos velocidad.
-
Presión: adapta la presión al terreno y tu peso.
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Terreno: seco, barro, mixto… cada superficie exige una banda diferente.
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Sistema: cámara, tubeless o tubular.
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Durabilidad: prioriza la calidad y la protección antipinchazos.
Mantenimiento de las cubiertas
El cuidado de las cubiertas es clave para su durabilidad y para evitar problemas en ruta.
Pasos básicos:
- Comprueba que no haya cortes ni deformaciones.
- Si usas tubeless, revisa el nivel de sellante y renuévalo si está seco.
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